Bienvenidos a la sala creativa, ¡luchamaníacos! Aquí donde nosotros ponemos a trabajar la cabeza y ustedes, con un poco de suerte, disfrutan de ello. A través de lo que están por leer, buscamos salirnos del molde y pensar en aquellos personajes, personalidades, luchadores que nunca existieron en el colorido mundo de la lucha libre, fuese en WWE o cualquier otra empresa con el correr de la historia. En un universo paralelo creemos que serían grandes estrellas.
Es posible que algunos, a lo mejor, presenten pequeñas similitudes con otros personajes reales —pues, como quien dice, en la lucha está todo hecho—, pero tranquilos, ¡nos cuidamos de que sean muy originales y fieles a una esencia propia! Ayudándonos con la inteligencia artificial para las imágenes (basadas en cómo visualizamos nosotros a esos personajes), pasaremos a hacer una descripción de los mismos junto a sus alturas, pesos, ratings de valoración y hasta sus temas de entradas. ¿Algo más que decir? ¡No! ¡A ello!
• 6 ideas de épicos personajes que nunca existieron
WHISPER
Nombre: Whisper «the Mime»
Peso: 106 kilos
Altura: 1,95
Rating: 91/100
Música de entrada: «Old Doll, Mad Father» de Bluerra-sai
Personaje: A Whisper the Mime (Susurro, el Mimo) le gusta esconderse. A veces la cámara lo enfoca, solo para perderlo de vista al regresar. A veces, le gusta jugar con sus oponentes. Deja la acción, cambiando su foco y, antes de seguir con el dolor, prefiere hacer cosas más divertidas, como pasar al otro de las vallas y dejar que su rival lo encuentre. A Whisper le gusta esconderse.
Pero con Whisper el Mimo, mucho tiene que ver su estado de ánimo. Encontrarlo de buen humor claramente son las mejores noticias para todo aquel que deba compartir el ring con este extraño sujeto cubierto de pintura blanca y detalles rojos (malas lenguas hablan de que es sangre, pero no podemos confirmarlo). Ahora, si Whisper no se siente bien, su agresividad no tardará en aparecer. A veces, cuando algo le duele mucho, su rostro cambia. Una sonrisa desdentada puede pasar a ser una mueca desquiciada en cuestión de segundos. Y ahí, agárrate, Catalina.
Algunos creen que es un poco tonto. Otros que lo comparan con Doink the Clown, «solo que más oscuro». Desde luego, su comportamiento lo es. No habla, se comunica por señas mudas. La altura no hace más que incrementar el miedo de sus oponentes, especialmente cuando se queda allí parado, inmóvil, mirando fija e inexpresivamente a quien tenga en frente.
THE GENIE
Nombre: «The Genie» Frank Bass
Peso: 114 kilos
Altura: 1,98
Rating: 96/100
Música de entrada: «Scales of Maat» de In the Company of Serpents
Personaje: Frank Bass se llama a sí mismo «el genio». No porque crea tener una inteligencia fuera de serie. Lo suyo va más por la sensación de que puede hacer lo que desee. Le gusta tener el control de las cosas, imponer las reglas y hacer todo de forma estructurada. Así, si alguna vez compartes vestuario con él sabrás —si no te lo ofrece por sí mismo, te lo harán saber los compañeros, pues es así de respetado—que sin importar quién seas ni tu lugar en la cartelera, siempre lo tendrás a disposición para su gran proyecto: Frank te concederá tres deseos.
¿Estás en medio de una rivalidad y quieres humilllar a tu adversario? Frank aparecerá y lo humillará. ¿Necesitas una victoria a toda costa y no tienes a nadie que te cuide las espaldas? Frank te ayudará a ganar. ¿Buscas un compañero de equipo para esta noche? No dudes en llamarlo, él responderá y te brindará seguridad. Ahora…
Cuando «el genio», cual genio de la lámpara, te concede esos tres deseos —y tienes la garantía de que los cumplirá porque trabajará incansablemente hasta hacerlo—, vas a generar una cuenta pendiente con él: Frank Bass te va a destrozar. Y lo hará bajo sus términos: sin descalificación, a puño limpio y sin restricciones. Él da, pero también toma. Es un trato justo. A la fecha, no ha habido transacción que no le haya resultado exitosa, para fortuna de sus «socios»… y especialmente desdicha.
THEM
Nombre: «Filthy» Sid y otros
Peso: 102 kilos (Sid)
Altura: 1,86 (Sid)
Rating: 90/100 («Filthy» Sid)
Música de entrada: «New Noise» de Refused
Personaje: ¡Anarquía! ¡Abajo el sistema! Son catchphrases un tanto oxidadas. No importa, porque «Filthy» Sid tiene el lubricante indicado para hacer desapecer todo rastro de óxido, transformando el grito de protesta en algo novedoso.
Hasta hace no mucho, Sid era un luchador del montón. Es verdad que no había tenido el mejor récord de todo el roster, lo que no quitaba que había conseguido victorias clave para ascender en la pirámide luchística. Lo merecía. La oficina no lo entendió así y la falta de oportunidades en esa instancia decisiva lo hizo caer en la frustración. Permaneció en ese espacio mental y lo que siguieron no fueron más derrotas, un efecto espiral del que no pudo salir y que hundió su carrera a lo más bajo.
Sid regresó hecho un hombre nuevo. Señaló dos cosas. La primera, a sí mismo, pues el haber sucumbido ante las frustraciones fueron una muestra de debilidad. En su lugar, debió haber luchado contra el sistema, demostrar que él tenía la razón. Y debió hacerlo a través del sendero de las victorias. Pero el gran culpable, a su modo de ver, era la oficina. La que le trucó el ascenso. La que favorecía a sus favoritos y ahogaba la carrera de los demás. Juntó a un grupo de luchadores que atravesaron situaciones desfavorables. Entre todos adoptaron el nombre de THEM (ellos), con la premisa de unir fuerzas para combatir la maquinaria: individualmente, quizás no sean los mejores; unidos, son imparables. ¡La unión hace la fuerza!
HAROLD’S WORLD
Nombre: Harold & Barnabas «Barney» Grim
Peso: 137 kilos (Harold)
Altura: 2,02 (Harold)
Rating: 95/100 (Harold)
Música de entrada: «Carousel» de Melanie Martinez
Personaje: Es inevitable: apenas te volteas por primera vez hacia Barnabas Grim, alias «Barney», la atención va directo hacia a su ojo izquierdo, reducido, lesionado, ciego. Esa pequeña deformación crea un cierto contraste con la elegancia que lleva consigo allí donde va, siempre con su traje bien planchado, su corbata prolijamente atada, el bigote bien afeitado y el incofundible sombrero, que aporta un aura un tanto misteriosa a su llamativa figura.
Lo segundo que notas al mirar a Barney es a la bestia que hay detrás suyo y que jamás deja su lado: Harold. Sí, Harold. Aunque tengas que mirarlo dos veces (o más) para comprobarlo, Harold es humano, por supuesto. Pero si piensas que es una bestia, no te culpamos. Poco se sabe de su vida más que fue encontrado en deplorables condiciones por un joven Grim. Era un salvaje que debió ser «domado». La lastimadura en el ojo izquierdo fue la consecuencia. Desde entonces, ha sido fiel a su viejo amigo.
Debido a la altura, agresividad y musculatura de su compañero, Barney buscó una vía para que éste pudiese exteriorizar sus inquietudes y, de paso, eludir que pasara a ser un estorbo, pues apenas si tenía el dinero para subsistir por su cuenta. Fue así como llevó a Harold (al menos así lo adoptó él; la bestia el hombre no pasó la instancia de los balbuceos) a ferias y freak-shows, donde pudo sacar provecho de su poderío enfrentándolo a otros civiles con recompensas de hasta mil dólares para quien lo venciera (sorpresa, sorpresa, jamás nadie pudo). De este modo, Barney dejó su trabajo y se centró exclusivamente en Harold, llevándolo a los cuadriláteros… Donde nadie pudo pararlo aún.
K.Y.L.L. «THE KID»
Nombre: K.Y.L.L. «The Kid»
Peso: 92 kilos
Altura: 1,81
Rating: 88/100
Música de entrada: «Doorman» de slowthai
Personaje: A la edad de seis años, fue dejado en un orfanato. Soñaba con el día en que fuera tomado por una familia, día que jamás llegó, en parte por las acusaciones de un comportamiento sumamente agresivo y malintencionado. Escapaba las instalaciones permanentemente, hasta que fue expulsado a sus doce, pasando a un reformatorio. A los catorce fue recibido nuevamente en el orfanato, pero debió regresar a la correccional cuando se enteraron que había robado un auto, en conjunto con una pandilla local. A los 18, cuando llegó a la mayoría de edad, cambió su nombre a Kristian Yule Lennox Landry, al que suele abreviar como «K.Y.L.L.».
A través de su vida, fueron muchas las personas que intentaron llevar a Landry por el buen camino, ofreciéndole el perdón de Dios y otras alternativas a su odio por la vida y todo ser humano que respirase. Apenas pudo, el chico se adentró en el mundo de la lucha libre, cumpliendo así su sueño de cobrar por lastimar a las personas. Se le reportaron varios incidentes en los vestuarios por su comportamiento errático, efusivo e indiferente hacia los demás, incluidos luchadores y promotores que buscaron encarrilarlo, obteniendo a cambio nada más que ninguneo e insultos. «Métete en tus asuntos», es su frase predilecta.
PIG
Nombre: Pig
Peso: 93 kilos
Altura: 1,86
Rating: 89/100
Música de entrada: «Piggy» de Nine Inch Nails
Personaje: Hay que decirlo: Pig le debe mucho a la familia Rhodes. ¿Sus dos mayores inspiraciones? Dustin Rhodes (Goldust), en primer lugar, y varios escalones más abajo, el patriarca, Dusty.
Fines de la década de los 70. «The American Dream» había apodado a Ole Anderson «Pigface» (cara de cerdo). Ambos se encontraban en medio de una intensa rivalidad en el territorio de Atlanta, haciendo lo que mejor sabían: hablar basura entre sí. Ole, en una de sus promos más recordadas, palpitó la lucha blindfold (a ciegas, donde ambos debían luchar con los ojos vendados) que les aguardaba, adjudicándose una ventaja: él, Ole, era capaz de hacer algo que Dusty no, y era que «podía olerlo». Pig no tiene cara de cerdo, pero demonios que tiene el don de «oler» a los demás.
Pig es un excéntrico como pocos. Tiene estilo (su estilo, al menos), tiene carisma, tiene promo. Es muy, muy extraño, como lo fue Goldust, el hijo de Dusty, a mediados de los 90. La vergüenza no está en su diccionario. Simplemente hace lo que quiere, cuando quiere, sin miedo a las consecuencias. Si el Joker se cruzara con Goldust y David Bowie, nacería este ser… único. No será el más fuerte, tampoco el más rápido o habilidoso, desde luego no el mejor, pero como luchador profesional, su extravagancia paga las cuentas.
Obsesionado además con el oro, su búsqueda por los títulos es permanente. Al no tener tantos atributos para llevárselos por las buenas, usa su inteligencia para buscar otras formas de adjudicárselos. Como Gollum con el anillo, su vida gira en torno a ello. Hasta el momento no lo hizo, pero podemos imaginarlo, si es que llegase el día, llamándolo «mi bebé» y sosteniéndolo cual bebé y cuidándolo cual bebé. Ese es Pig, Piggy, Pig.