Versus

Jon Moxley vs. Dean Ambrose — ¿Quién es mejor?

Puedes conocerlo como Jon Moxley o como Dean Ambrose, como Mox o The Lunatic Fringe, por WWE o por AEW (o, por qué no, por las indies); de una forma u otra, su nombre real es Jonathan Good y bajo estas dos encarnaciones se ha asentado como uno de los brawlers más importantes de la última década y monedas. Podemos apreciarlo por sus dos caras y evitar las siempre odiosas comparaciones; o podemos apreciarlo y meternos de lleno en las comparaciones, odiosas sí, aunque atrapantes, también. Sí, hagamos eso…

Personaje

Seis años. Seis años debieron transcurrir para que WWE se fijase en él. Lo habían visto en promociones de pequeña envergadura como CZW, acaso la sucesora de ECW en tiempos más recientes; hablamos de lucha extrema, violencia desmedida, la verdadera esencia del personaje de Jon Moxley. Fue como Mox, por cierto, que se inició como luchador, y así se mantuvo hasta que WWE, repetimos, se fijó en él.

Una vez hizo la transición, las cosas debieron cambiar. El gimmick no apto para todo público que había construido a su medida sufrió grandes modificaciones y nació de este modo Dean Ambrose, un lunático simpático pero peligroso que se caracterizaba por la imprevisibilidad y presentaba una pizca de humor cuando el momento lo requería. Esta curiosa combinación lo convirtió en un favorito del público y lo llevó a liderar a los Shield en sus primeros compases. Prácticamente, jamás dejó de ser un estelarista bajo el ala de WWE.

En 2019, al salir de “la W”, volvió a sus raíces. Retomando el papel de badass adicto a la violencia en AEW, supo despojarse de cualquier limitación que se interponía en su camino y desarrolló un Jon Moxley todavía más llamativo que el anterior (o que el propio Ambrose), con el plus de implementar la experiencia que le habían regalado casi diez años en WWE.

MARCADOR PARCIAL:

Jon Moxley………. 1

Dean Ambrose… 0

Carisma

¿Cómo se puede comparar el carisma cuando se trata de una misma persona? Bueno, es verdad que sin importar el rol interpretado, el carisma natural es el carisma natural. Es inalterable. Peeero… Hay un pero, sí: porque dependiendo del personaje, el individuo en cuestión podrá exprimir en mayor o menor medida esa personalidad nata. Por ejemplo, “Mean” Mark Callous pasaba desapercibido; The Undertaker era uno en un millón. ¿Nos explicamos?

En estos términos nos paramos para realizar la comparación. Básicamente, la pregunta es: ¿qué faceta le facilitó magnificar ese famoso it-factor en mayor medida?

Cuando uno echa un vistazo rápido a Moxley no ve solo a un luchador. No: ve a un auténtico badass que por seguro no caerá a menos que un camión de luchadores lo hagan caer, y solo porque el cuerpo le dirá basta. Verlo ingresar al ritmo de “Wild Thing” es cautivador, magnético, una muestra de una personalidad excepcional.

Dicho esto, también es justo aseverar que mientras estuvo en WWE, mucho del peso de su éxito se apoyaba en su capacidad de exprimir al máximo ese carisma y hacer que cada segundo de exposición en televisión fuera acompañado por la sensación de no poder dejar de mirar.

MARCADOR PARCIAL:

Jon Moxley………. 1

Dean Ambrose… 1

Promo

Hacíamos alusión antes a una porción de historia que a menudo se pasa por alto. Dean Ambrose fue tan líder de The Shield como alguna vez lo fue Roman Reigns. De hecho, hubo un tiempo donde Reigns y Rollins, The Shield como grupo, dependían mucho de él. Al ascender al elenco principal, Ambrose fue situado como el cabecilla y, a diferencia de cómo el tiempo acomodó las piezas, WWE no tenía miedo en ocultarlo. ¿El motivo? Era el que más confianza tenía al micro, y por tanto el que más confianza brindaba.

La promo de Jonathan Good siempre fue impecable. Ha sido, probablemente, su más grande aliado y un factor determinante en su masivo éxito allá donde fue. Ambrose le dio grandes alegrías; Moxley, no obstante, lo obligó a ir más allá. Cruzó fronteras y lo sacó de la zona de confort en la que Ambrose estaba encerrado. Del modo en que lo vemos, no hay siquiera un punto de comparación.

MARCADOR PARCIAL:

Jon Moxley………. 2

Dean Ambrose… 1

 

In-ring

Señoras y señores, permítannos subrayar que para ser dos veces luchador del año para el Wrestling Observer, una como el mejor del mundo según el PWI 500 y otra más de acuerdo al criterio de Sports Illustrated, no basta únicamente con depender del micro, la personalidad o un buen personaje. Tener un gran desempeño en el ring es menester.

AEW le supuso un renacimiento en el área luchística. WWE lo había malacostumbrado, dijo en algún momento. Lo restringía en el ring de un modo que no lo dejaba expresarse. Su pasión jamás dejó de ser la violencia. Aquello lo impulsó a alzar la voz y apuntar públicamente contra un intocable de la directiva, Brock Lesnar, acusándolo de “haragán” por no querer incorporar varios elementos extremos en el combate que los encontró en WrestleMania 32.

Y es verdad, en WWE se ganó a gota gorda el mote de Iron Man (luchador que más combates tiene en un año calendario), un dato no menor, pero fue en su etapa post-WWE que se liberó y explotó su versión de brawler más pura: aquella que no conoce límites y se olvida de la rutina que muchas veces llevó a cabo en el imperio de los McMahon. A partir del adiós, se enfocó en una sola máxima: dejarse llevar por la intuición, por lo general demasiado arriesgada, pero ante todo una garantía de entretenimiento.

MARCADOR PARCIAL:

Jon Moxley………. 3

Dean Ambrose… 1

 

Taquilla

Es realmente complicado analizar la taquilla de Jonathan Good en WWE vs. AEW. Por empezar, hablamos de dos sistemas completamente distintos. Ambrose transitó la mayor parte de su carrera en el main roster con WWE Network como medidor. En AEW, en cambio, se usa el tradicional método de PPV. Asimismo, la magnitud de ambas empresas difiere en demasía para hacer un estudio justo, con una WWE que por años ha dejado de ser nombres-dependiente para centrarse en la marca en sí como motor para cortar tickets.

Trazado este panorama, es también cierto que sin estar en el top 3 durante gran parte de su estadía, su venta de merchandising en WWE por lo general siempre estuvo bien posicionada. Los live events donde encabezaba —que fueron muchos—también vendían. Sus rivalidades eran en mayor parte de lo más visto en distintos puntos de su carrera en WWE.

En resumen, los números que (se podría estimar que) cosechó en WWE lo respaldan. Eran buenos, no por eso fueron en algún modo sobresalientes haciendo un balance general.

En AEW, lejos de equiparar lo alcanzado en el otro territorio por cuestiones obvias, su poder de taquilla fue más notorio. Aquí no solo tenía un protagonismo mucho más grande, sino que además fue junto a Chris Jericho una de las dos únicas legítimas estrellas reconocidas por el fan casual durante los dos años iniciales de la marca. En los hombros de ambos competidores reposó mucha de la responsabilidad detrás de los grandes números primeros. Su debut en Double or Nothing 2019 redobló el interés en la naciente compañía y demostró que eran cosa seria. “¿Qué les parece AEW ahora?”, dijo famosamente Jim Ross luego de la sorpresiva aparición.

Por otra parte, fue el escogido en un momento clave donde se puso a prueba su valía. Luego del desastre de CM Punk y The Elite post-All Out 2022 que dejó a la empresa falta de nombres de peso, él se hizo cargo de la situación y mantuvo los ratings en orden. También se le asignó la tarea de subir las cifras de Rampage, que cumplió con creces pero que, al dejar de aparecer, volvieron a bajar.

Claro que poco pudo hacer cuando la bola de nieve descendiente chocó y se llevó puesto a gran parte de la audiencia de AEW por diversos motivos, mas nuestra posición es clara:

MARCADOR PARCIAL:

Jon Moxley………. 4

Dean Ambrose… 1

Look

Llegamos así a un apartado en el que, sabrán comprender, no es necesario que nos estacionemos demasiado.

Comparar al Jon Moxley pre-WWE con Dean Ambrose es dar por ganador a la Superestrella de WWE sin mayor meditación. Distinta luce la papa si la lupa se posa de repente en el enfrentamiento que realmente toca: “The Lunatic Fringe” contra “Mox”.

Es decir, echemos un vistazo a ambos y tendremos un auténtico caso de “antes/después”. Quizás Ambrose fuese más atractivo a los ojos de la audiencia casual femenina —una singularidad que se le atribuyó en más de una ocasión—, por supuesto. Ahora, si lo que buscamos es al Final Boss (y dejaremos a The Rock fuera de esto), el triunfo es indiscutido.

MARCADOR PARCIAL:

Jon Moxley………. 5

Dean Ambrose… 1

 

The Shield vs. Blackpool Combat Club

Son contados con una sola mano los casos de luchadores que tuvieron la fortuna de formar parte de más de una facción de trascendencia antes de colgar las botas. Pues bien, Good ha sido uno de los privilegiados: The Shield y Blackpool Combat Club.

Puede que ni siquiera sea necesario explicar el impacto de The Shield en WWE y la lucha libre en general. Como uno de los stables más dominantes de todos los tiempos, el trío demostró ser un supergrupo no solamente mientras estuvo en actividad; especialmente después, moldeando a tres de las más grandes estrellas de esta generación y repartiéndolas por el mundo de la mano del propio Moxley.

BCC tuvo su buena cuota de relevancia. Especialmente en sus orígenes logró causar un terremoto en la escena norteamericana, con esa revolución generada por la unión de dos pesos pesados como Moxley y Bryan Danielson a través del gran conciliador William Regal. La adición de Wheeler Yuta y posteriormente Claudio Castagnoli aportaron, resultando en una combinación perfecta de tipos duros.

Por supuesto, por muy bueno haya sido el trabajo de una de las facciones más grandes de la historia de AEW, The Shield hay uno solo, de modo que:

MARCADOR FINAL:

Jon Moxley………. 5

Dean Ambrose… 2

 

 

Jon Moxley vs. Dean Ambrose — ¿Quién es mejor?

Que suene la campana, ¡porque tenemos un ganador!

Para Cuadrilátero Tops, Jon Moxley es mejor que Dean Ambrose. En resumen, consideramos que la versión actual de Jonathan Good va más con la esencia del luchador y le permite liberarse más respecto a la versión de WWE. Ambrose supo explotar más su carisma. Además, dos palabras: The Shield. Sin embargo, creemos que recién al hacer la conversión a Moxley fue que pudo desplegar su verdadero potencial.

 

¿Estás de acuerdo? ¡Déjanos saber tu opinión en nuestras redes sociales!

Cuadrilátero Tops

Compartir
Publicado por
Cuadrilátero Tops

Entradas recientes

Poder, internas y recelo: así se convirtió Triple H en el hombre más poderoso de WWE

No muchos miran del Triple H estelarista para atrás. Antes de ser Campeón Mundial, figura…

1 mes hace

10 cosas que no sabías de Carlito

¿Alguien de por aquí que no sea “cool”? ¡Llevo una manzana y no tengo miedo…

1 mes hace

Death Valley, easter eggs y despedida: cómo bookear Undertaker vs. Sting

¿Quién dijo que Sting vs. The Undertaker no iba a suceder jamás? Bueno, quizá no…

1 mes hace

Tony Khan en AEW: ¿Amateur fracasado o genio incomprendido?

Las críticas no son nada nuevo. En lo absoluto. AEW ha convivido con ellas prácticamente…

1 mes hace

Diferencias creativas, planes descartados y su casi firma con AEW: Bray Wyatt y su tras bambalinas en WWE

“Soy un pedazo de basura”, se decía a sí mismo en un lamento constante. “¿Así…

2 meses hace

10 luchadores que pidieron cambiar su tema de entrada en WWE

La música de entrada, esa extensión del luchador que brinda la posibilidad de crear un…

3 meses hace